Cap. 11: Una noche interesante

De camino al hotel estoy nerviosa, nerviosa porque quiero causar una buena impresión a Raúl, quiero que me mire y piense: ‘qué guapa es’ y también porque desde el ballet no me puedo quitar esa sensación de que me observan y me persiguen, bueno supongo que será normal después de lo que me ha pasado.

Según entro por la puerta del hotel me doy cuenta de que no sé el número de habitación de Raúl, ni el de Nicky

-Hola-dice alguien a mi espalada es Nicky con mi hermana, que va guapísima, bueno las dos van guapísimas.

-Hola-digo mirándome y pensado “Aunque la mona se vista de seda mona se queda”

-Raúl, ¿qué haces ahí, a qué esperas?

Raúl está en la puerta del ascensor sin moverse no aparta la mirada de  mi “tan mal voy” miro para el suelo y me sonrojo

-¿No nos dices nada?-dice Nicky esperando un cumplido

-Estás preciosa-dice Raúl, seguro que a Nicky

-¿Y nosotras?-vuelve a preguntarle y me doy cuenta que me lo había dicho a mi

-Emmm… también, estáis todas guapísimas-dice un poco embobado al principio

-Gracias-decimos las tres a la vez.

Al llegar al restaurante, uno que parecía muy caro por cierto, nos sentamos en una mesa reservada a nombre de Nicky Reed, esta mesa está situada en el centro del restaurante, “¿Cómo ha podido conseguir está mesa en un sitio como este?”

-Es famosa-me susurra Raúl al oído

“Pues a mí no me suena”

No dice nada solo encoje los hombros

-Bueno, Elena cuéntame algo de ti

-¿Cómo qué? Mi vida no es nada interesante, la verdad, la tuya seguro que lo es mucho más

-No, te equivocas-dice muy seria- Es inquietante, todo el mundo te observa y sientes que no tienes vida propia, que eres solo alguien creado, que no existes, que no importas.-parece que ha terminado, pero con una sonrisa  prosigue-Pero es lo que tiene la fama, ¿no?

No puede ser empiezo a sentir lástima por ella, debería odiarla “me odio”. En ese momento miro a Raúl sabiendo que me ha oído, pero el solo me mira y parece no haber oído nada está como si no estuviera

-¿Raúl estas bien?-pregunto un poco preocupada

-¿Por qué?

-Porque no paras de mirarme y no sé pensaba que te pasaba algo

-Lo siento-dice sonriendo y apartando la mirada

“No partes la mirada, no he dicho que me molestase”

Tras esto él se gira y me vuelve a mirar como si  fuera importante para él y yo durante unos minutos me lo creo y soy feliz, feliz porque él también lo es para mí

-Elena yo quiero estoy-me dice Irene devolviéndome al mundo real. Entonces miro la carta y me doy cuenta de que todo es muy caro.

-Elena no po…

-Claro que podéis porque esta noche pago yo recuerdas-dice Nicky con una sonrisa “gracias por dejarme mal”

Tras la cena me fui al baño y Nicky me acompaño

-Sé que te gusta-dice de repente

-No, claro que no solo somos amigos-digo de forma entre cortada está claro que miento

-A él también

-¿Sí?

-Sí. Durante todo el tiempo que he pasado con él nunca me ha mirado como te está mirando a ti esta noche

“Nunca la ha mirado asi”

Entonces sale del baño sin despedirse y yo me quedo mirándome al espejo como si él fuera a decirme lo que tengo que hacer, “que tonterías algo” pienso y salgo del baño

-Irene nos vamos a casa ya es tarde

-¿Ya os vais?-pregunta Nicky

-Sí, Irene está cansada

-¡No lo estoy!-grita ella

-Sí lo estás-la agarro-Bueno agur-“quiero salir de aquí ya”

-Espera-Raúl

-¿Qué?-“Raúl deja que me vaya”

-Toma-de repente toma mi mano y escribe algo en ella

Según salimos del hotel hay un taxi en la puerta que nos espera y antes de montarme vuelvo a sentir que alguien me observa y tengo miedo así que entro con rapidez en el coche. El taxi nos deja en frente del portal y tras pagar al taxista cojo a mi hermana que se ha quedado dormida y entro en el portal de forma precipitada.

Cuando ya estoy en casa lo primero que hago es acostar a mi hermana y al pasar por la habitación de mi hermano me doy cuenta que no está. También paso por la de mis padres tras dejar a Irene y pienso “odio esta casa” y siento mis ojos llorosos y al secarlos con la mano me acuerdo que Raúl me escribió algo en ella

-6895…-“Su número de teléfono”

El resto de la noche la paso cogiendo el teléfono, marcando su número y volviendo a colgar.

Mientras tanto en un lugar oscuro en cuyo centro iluminada por una luz intensa una chica de unos 19, de altura y peso medio, pelo corto y castaño, ojos color miel, se encuentra de pie mirando a la oscuridad

-Melany estás haciendo un buen trabajo, sabíamos que tú podrías hacerlo-dice una voz de un hombre que no podemos distinguir por la falta de luz

-Muchas gracias-dice la joven

-Sigue detrás de esa chica y se te recompensará si cumples con las órdenes. Como se hizo cuando acabaste con sus padres

-Sí señor-dice esta sin ninguna expresión en el rostro-Ya puedo irme-dice agachando la cabeza

-Por supuesto-dice la voz

Se oyen unos murmullos cuando la joven susurra-Lo conseguiré.